Durante este verano 2017 he tomado como fuente de inspiración el mar y los atardeceres sobre campos de flores: amapolas, girasoles, rosas; todos ellos plagados de luz y color vivo en el que ha dominado el verde y el azul en sus mas variados tonos. Quizás sea por las aguas tan fabulosas en las que me he bañado del mar, río y lagunas de la sierra de Gredos, quizás porque me siento fascinada por estas tonalidades. Cada pañuelo, fular y pareo  ha sido realizado con una técnica distinta: en seco, húmedo con figuración o abstracción.